Norm Breyfogle, víctima de un infarto cerebral

Quienes visitaran Zona Negativa hace dos años recordarán sin duda que en otras fechas navideñas (las de 2012) se publicó la infausta noticia del ictus sufrido por Peter David. Afortunadamente, el guionista estadounidense pudo recuperarse y volver a la plena actividad. Sin embargo, en otra víspera del cambio de año, hay que hacer referencia a otra situación similar cuyo protagonista ha sido el dibujante Norman Breyfogle.

Según informaciones remitidas desde la propia página caralibrera del autor y Comic Book Resources, Breyfogle habría sufrido un ictus que le habría dejado paralizado el lado izquierdo, un hecho ya de por sí grave al que se añade el detalle de que don Norm es zurdo.

Desde diversas páginas –como el perfil caralibrero de Phil Jiménez, la citada Comic Book Resources o la bitácora Men of Bronze- se informa de que se ha puesto en marcha una campaña de recogida de fondos para ayudar al dibujante en su proceso de recuperación. Una vez más, el tratamiento necesario está fuera del alcance del bolsillo de quien lo necesita, y aunque pueda resultar cansino repetir las diferencias entre una sanidad pública universal y un sistema de aseguramiento privado, éste es el enésimo ejemplo de que algo falla cuando profesionales que llevan varias décadas en el sector carecen de recursos para hacer frente a un revés de la vida de los que podría pasarle a cualquiera sin comerlo ni beberlo. En fechas recientes, otro autor sacudido por las desgracias como Stan Sakai comentaba las dificultades que tenía para conseguir cobertura sanitaria al tener una profesión que, desde la perspectiva de las aseguradoras, era considerada como “inestable”. Es encomiable que la profesión haga piña cuando uno de sus integrantes está en situación de necesidad, pero no deja de ser un acto de caridad para cubrir una injustificable carencia dentro de un sistema de derechos y libertades.

Por tercer año consecutivo toca despedir el año hablando de las necesidades de un autor que ha dado horas incontables de diversión y entretenimiento a la parroquia. Tres navidades hablando de ejemplos de una situación a la que parecen abocados los profesionales de un sector que debería preocuparse un poco más por sus creativos y sus condiciones de vida.

Desde aquí, sólo queda desearle a don Norm una pronta recuperación.

Vía Zona Negativa http://www.zonanegativa.com/norm-breyfogle-victima-de-un-infarto-cerebral/